1910 – Una historia, muchos caminos…
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… El contexto de transformación educativa que marcó los pasos de la educación argentina, ha hecho que nuestra Escuela, no solo esté presente brindando aquello para lo cual sus hacedores iniciaron el camino, sino más aún, ayudando a construir trayectorias escolares y dando forma a nuestra historia; ya no se trata solamente de “educar al soberano”, hoy más que nunca nuestra Escuela se ha transformado en el vínculo de filiación social y cultural … |
Desde 1910 a la fecha han recorrido el espacio de la Escuela Normal “Fray Cayetano José Rodriguez, inumerables personas, y de ellas tenemos incalculables recuerdos, anécdotas y experiencias cosechadas entre profesores, alumnos, auxiliares, administrativos y familias que han dejado su sello impreso dentro de ella.
Cada uno de los espacios atesoran las más valiosas vivencias de quienes formaron y forman parte de esta institución pública, gratuita e igualitaria que impera en la memoria colectiva como símbolo de un país que se destaco por hacer de sus establecimientos educativos la cuna en la que se mece la ciudadanía.
Se entrecruzan la tinta china con la era digital, las tizas y el “cuadro de honor” con los libros en fotocopias.
Entre 1910 y 1960, comienza a tejerse la historia.
Con la visita del Ministro de Justicia e Instrucción Pública Rómulo Naón, por decreto decreto del Poder Ejecutivo de San Pedro, Pehuajó, Tandil y Olavarría se fundaron las escuelas normales en el año del centenario de la Revolución de Mayo. Así el 14 de abril de 1910, comenzaron las clases en un edificio anterior ubicado en calle Mitre.
En 1934, en una asamblea convocada por el Director, unánimemente votaron por el nombre Fray Cayetano José Rodriguez, en homenaje al sampedrino filósofo, teólogo, poeta, periodista e insigne patriota y congresista de 1816 durante la declaración de la Independencia.
Mediante un decreto del Presidente de la Nación, Manuel de Iriondo Justo acepto este nombre aduciendo a que “su memoria sirva de ejemplo a la juventud que concurre a sus aulas”
La escuela iba ganando prestigio y con ello cada vez eran más los aspirantes de la propia localidad y de localidades vecinas, generando la necesidad de realizar la apertura de una nueva división, que fue creada con el consentimiento del Presidente con el detalle de que quién se hiciera cargo debería hacerlo ad honorem, tal lo expresado en el pedido.
En 1935 era el año de las bodas de plata de la escuela, y coincidentemente se termina el nuevo edificio de 2 cuadras cedidas por el Municipio al Gobierno Nacional, que es el actual edificio ubicado en calle Bottaro al 900.
En 1960, ya era un problema la falta de vacantes por la creciente demanda que fue aumentando año a año desde su creación. Durante estos 50 años además de la creciente demanda, se fueron creando diversas modalidades de estudio con nuevas orientaciones, cambio de planes educativos, entre otros.
Con los 50 años de la escuela, se editó un pequeño gran libro que hoy es un elemento que rescata nuestra historia, contada por el profesor Francisco Giovanelli.
Y con los 100 años de la escuela, se organizaron distintas actividades previas y se cerró con un emotivo acto frente a la puerta de la Escuela.
Hoy a mas de 120 años, la demanda, la matricula y los egresados siguen aumentado y la escuela continúa adaptándose a los cambios necesarios para seguir creciendo y mejorando en esta apasionante e inspiradora tarea de educar.
